MIRALDA. Three Projects (NYC-MIA-BCN)

 

La exposición MIRALDA TRES PROYECTOS (NYC-MIA-BCN) presentará obras originales, registros y archivos documentales de The Last Ingredients (MIA), de Apocalypsis Lamb (NY-BCN) y de Santa Eulalia. 175 (BCN).

The Last Ingredients fue una performance de procesión de vehículos y un banquete público en Miami en 2016, que celebraba la inauguración del centro de arte Faena Forum de Rem Koolhaas. La colcha nupcial Apocalypsis Lamb formó parte del proyecto Honeymoon  en que se celebró la boda entre la Estatua de la Libertad de NY y el Monumento a Colon de Barcelona; en 1989 la colcha participó en el recorrido del Columbus Day en la ciudad de Nueva York  y  en 1995 desfiló hacia el MNAC donde fue izada y en el cual permanece como parte de su colección permanente. Por último,  Santa Eulalia. 175 consistió en una performance de una procesión con comitiva de 80 músicos y 150 estandartes, además de una serie de actos festivos con motivo de la celebración del 175 aniversario de la tienda Santa Eulalia en 2018.

Se mostrarán como material de registros; fotos, dibujos, videos, objetos, collages, etc., que permitirán al espectador hacerse una idea del alcance y complejidad de cada uno de estos trabajos  con la intervención pública de carácter participativo y procesional y que caracteriza al artista.

 

 

MIGUEL ANGEL RÍOS, Landlocked

En su trabajo, Miguel Angel Ríos integra un acercamiento conceptual riguroso junto con una estética manual meticulosamente construida. Desde los años setenta ha trabajado alrededor del concepto de lo “latinoamericano” utilizando dicha idea como estrategia artística y como problema político. Desde el año 2000, Ríos ha explorado también el video para crear narrativas simbólicas acerca de la experiencia humana, la violencia y la muerte.

LANDLOCKED:  Bolivia ha sufrido desde hace varios siglos un bloqueo al acceso al océano Pacífico. Landlocked es una metáfora de deseo a lo inalcanzable. Perros al pie de monte en altas montañas de Los Andes, han sido entrenados para cavar y hacer su trabajo, creando así una ilusión para llegar al océano.

YAGO HORTAL, Rigor y Rosa

Yago Hortal plantea en Rigor y Rosa un ejercicio de síntesis y de confrontación de la semántica de su lenguaje y tensiona los fundamentos de su pintura a través de una inversión de los conceptos asimilados y de una renuncia a sus lugares de confort. En una reto introspectivo y mediante una reducción formal de medios expresivos, desnuda su obra en fondo y forma reafirmando así su trabajo.

A través de una paleta visual dotada de un gran cromatismo con uso de colores fluorescentes, Yago Hortal invierte la dualidad de fondo neutro y protagonismo de la pincelada para profundizar en las especificidades de su praxis y dotar de valor a todo el cuadro. En las ilusiones ópticas cognitivas como la Copa de Rubin investigadas por el psicólogo Edgar Rubin y desarrolladas por la teoría de la Gestalt, se produce la percepción multiestable o tendencia a saltar adelante y atrás entre dos o más interpretaciones, y de esta manera Hortal juega con la alternancia del protagonismo de fondo y figura. Así, enfatiza toda la superficie pictórica y reivindica la aportación del fondo como espacio positivo a percibir de manera autónoma en igualdad de condiciones con la pincelada del primer plano.

Estas obras sintéticas se despojan de todo artificio y permiten al espectador apreciar con mayor nitidez las enérgicas pinceladas generadas a través de ritmos de aceleración y pausa que fluyen en la composición a modo de explosión de color. Asimismo, estas pinceladas devienen más estilizadas y conducen el recorrido de la mirada aportando sensación de movimientoa la representación. Este proceso de deconstrucción acentúa la trazabilidad del proceso creativo a través de la evidencia de la técnica utilizada con las salpicaduras y goteos de pintura recortados sobre el fondo. De este modo, las formas se expanden por toda la tela, proceso que culmina en la expansión de la pintura más allá de los límites del lienzo en alguna de las obras, dotando a los artefactos de un marcado carácter escultórico. En un nuevo impulso, Yago Hortal emplea a menudo polípticos de diferentes medidas y disposiciones que irrumpen en el espacio arquitectónico agregando el vacío en el que se reflejan y se fusionan los colores como superficie pictórica a aprehender.

Ola Kolehmainen presenta «Sacred Spaces»

Ola Kolehmainen recibió en 2014 un encargo de la Borusan Collection de Estambul para desarrollar un proyecto fotográfico sobre la tradición bizantina y las mezquitas construidas por el arquitecto otomano Mimar Sinan. La obra de Ola Kolehmainen se ha caracterizado por presentar imágenes de arquitectura contemporánea y en esta ocasión y por primera vez antiguos edificios históricos se convirtieron en el objeto de trabajo. A partir del encargo y de su estancia en Estambul, Ola Kolehmainen concibió en paralelo la idea de la serie Sacred Spaces en que se vincula nuevamente la espiritualidad con la creación contemporánea a través de un extenso estudio del legado estético e histórico de la arquitectura religiosa.

El proceso de fotografiar los antiguos edificios vacíos tomó al artista casi cuatro años de trabajo. Las obras son el resultado de una investigación exhaustiva de la iluminación y de los encuadres, basándose únicamente en la luz natural y artificial preexistente en el edificio sin ningún tipo de manipulado o efecto . Cada emplazamiento requirió tomar las vistas en una hora cuidadosamente seleccionada en un determinado momento del año para capturar el ambiente deseado.

En determinadas obras de esta serie Kolehmainen desarrolla un nuevo enfoque visual a partir de una técnica de fragmentación y deconstrucción. La vistas de los espacios se dividen y se vuelven a ensamblar en una suerte de collage a partir de múltiples perspectivas que conforman una única imagen. De esta manera, las fotografías ofrecen una sensación tridimensional a través de una mayor profundidad de campo y de un amplio rango de luces y sombras. Kolehmainen compara esta técnica de detalles encuadrados con la lectura de un libro:

 

«Quedas atrapado. Atrapado en los detalles. Incrustado. Tenemos que regresar. Enfócate en un punto de referencia. El marco nos ayuda a enfocarnos en los detalles dentro de él».

 

El resultado del proyecto deviene una celebración visual donde la atmósfera y la luz son el hilo conductor que entrelaza imágenes de los edificios de las principales religiones monoteístas. Las antiguas iglesias, sinagogas y mezquitas aportan a la obra del artista un nuevo paradigma de investigación que captura sublimidad y misticismo. Al mismo tiempo, su obra refleja los puntos en común y subraya las influencias mutuas de las distintas religiones invitando al espectador a la reflexión acerca de la naturaleza universal de los espacios sagrados.

 

Francis Ruyter “Let Us Now Praise Famous Men”

El título de la presente exposición Let Us Now Praise Famous Men se refiere al libro homónimo del escritor James Agee ilustrado con fotografías de Walker Evans. Publicado en 1941, documentaba la vida rural en los Estados Unidos durante la época de la Gran Depresión de los años 30. Francis Ruyter utiliza el apropiacionismo como herramienta; todas las pinturas tienen como referencia fotografías del ingente patrimonio que atesora la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos. Se trata de uno de los mayores archivos del mundo creado a partir de los fondos de la Farm Secure Administration y la Office of War Information: imágenes en blanco y negro que retratan la vida de los norteamericanos entre 1935 y 1944. Estas imágenes, producidas a través de agencias gubernamentales, trascienden la propaganda y se han convertido en referencia de la identidad estadounidense. Se trata de un archivo revisitado por múltiples autores con un carácter generativo a medida que se digitaliza y disemina.

Los objetos de archivo de la era post industrial ya han sido sometidos a sistemas de orden y reclasificación y últimamente son difundidos en un esquema global entrópico a través de internet. La creciente presencia de bancos de datos, archivos de imágenes e interfaces visuales nos permite rastrear el interés de Ruyter en los archivos fotográficos. Estos se asemejan a ruinas tecnológicas y abordan los cambios del conocimiento científico y social que proporciona a las pinturas de Ruyter una profundidad contextual de referentes conectados mediante nodos interrelacionados.

El proceso artístico de Francis Ruyter fusiona las nuevas tecnologías con técnicas tradicionales de dibujo y pintura. Ruyter usa pintura monocroma y marcador permanente para recrear las imágenes de estas fotografías. Estos trabajos se despliegan visualmente como pinturas abstractas a pesar su origen figurativo. Nos enfrentamos a obras sintéticas con un marcado reduccionismo tonal, pintadas con colores no naturalistas y compuestas de planos de colores enérgicos. Este cromatismo saturado entra violentamente en conflicto con nuestra percepción del acto fotográfico como documento gráfico que aporta verosimilitud a la imagen. Los contornos trazados dividen la superficie en planos carentes de sombras en una representación en que se elimina la ilusión de profundidad. Esta negación del volumen reduce a la mínima expresión el origen fotográfico de la imagen como lenguaje de la luz y enfatiza el carácter marcadamente bidimensional de la obra.

 

Teresa Serrano, The forgotten history of the first drug war

Sin duda alguna el narcotráfico y la guerra contra las drogas en México han generado un nutrido imaginario a su alrededor. Este conjunto de imágenes fuertemente simbólicas ha trastocado muchas de las relaciones que establecemos con la cultura que deriva del mundo de las drogas y con la naturaleza asociada a ésta.

El caso de la amapola (Papaver Rhoeas L.) es definitivo de esta demonización de la naturaleza asociada a las drogas. Otrora planta común y silvestre, en la actualidad es una bella flor demonizada por su utilización en la producción de narcóticos químicos, por lo cual es una flor que ha perdido su condición natural en libertad. Ha devenido en una flor encubierta, presa de los laboratorios clandestinos de la droga.

De manera muy aguda Teresa Serrano ha abordado de manera reflexiva y crítica pero no menos poética las políticas asociadas a la guerra a las drogas en su país natal, México, partiendo de la amapola como un poderoso argumento.

En 2016 se dedicó a la realización de 24 amapolas que como indica la propia artista, “fueron pintadas en carpetas de papel Fabriano, Strathmore y Canson en acrílico, directamente, sin dibujo previo. Pinturas realizadas de una manera ‘purista’ como ilustraciones botánicas. Son un tributo a la hermosa amapola, flor roja aterciopelada que produce la heroína. Debido a la guerra contra el narcotráfico en México, la planta ya no se ve crecer espontánea en el campo. Ha sido estigmatizada. Sólo es posesión de los narcotraficantes que han causado más de 60,000 muertes en territorio mexicano, que es una fosa común de personas desaparecidas”.

Este gesto repetitivo en torno a la reproducción de la amapola que recuerda a su vez el célebre aforismo de Gertrude Stein: “a rose is a rose is a rose” tuvo a su vez su contraparte en una obra en vídeo: técnica artística en la cual Teresa Serrano es pionera en Latinoamérica. Su vídeo Amapola también de 2016, es una obra paradigmática no sólo del tema sino de la producción de esta importante artista mexicana. En ella recupera a la flor desde su estigma, y en un gesto de resistencia frente a su condición negativa, la enriquece desde un imaginario más amable y de alguna manera universal, pues la propia Teresa Serrano canta en su vídeo la célebre canción Amapola del compositor gaditano José María Lacalle: un himno popular y clásico sobre esta flor. El vídeo sin duda pone en tensión ambos universos -el negativo, representado en una única amapola en medio de un vasto campo – y el positivo, encarnado en la romántica y sensiblera canción de Lacalle.

Sin embargo, The forgotten history of the first drug war es un proyecto aún más sugestivo por cuanto cristaliza la dimensión histórica que ya tiene el trabajo de esta artista, pues deja en evidencia la mirada atenta que Serrano siempre ha dedicado en su trabajo a las tensiones sexuales, sociales, políticas y religiosas del mundo actual. Esto se pone de manifiesto en la incorporación a la muestra de seis piezas históricas, realizadas hace un cuarto de siglo antes y sobre este mismo tema.

En 1993 Teresa Serrano abordó la problemática de la que entonces era la primera guerra contra las drogas en una serie de dípticos realizados con collage y pintura. En estas obras la artista incorpora a las amapolas desde un registro imaginativo en la cual la flor no era la planta secreta y negativa de nuestros días, aun cuando por esos años estaba sufriendo sus primeros combates por parte de las organizaciones antinarcóticos mexicanas y la DEA estadounidense. En los dípticos, las flores se enfrentan a sus productos derivados desde el ámbito comercial de viejas y amables publicidades farmacéuticas. Esta condición “espejeante” es doble puesto que el collage se realiza con los anuncios apropiados de los derivados de la amapola mientras que la pintura y el dibujo delinea a las propias flores. Estos dípticos anunciaban a su vez, gracias a las inscripciones textuales de Serrano, que el presente de la flor era el de su primera guerra. De manera paradójica, estas frases situaban a las bellas amapolas pintadas o dibujadas y a sus productos farmacéuticos en el espacio romántico de su historia.

Con The forgotten history of the first drug war la artista nos recuerda que esa guerra es ya una historia olvidada (y quizás una guerra perdida) y que la amapola está viviendo un conflicto permanente para su subsistencia natural lejos de esta guerra bastante artificial contra el narcotráfico y su imaginario negativo. Al menos la amapola sobrevive, a contracorriente de su desaparición, en la inteligente y sutil obra de Teresa Serrano.

 

 

Carlos Palacios

Catalina Jaramillo presenta «Las Palabras del Optimista»

La artista colombiana Catalina Jaramillo presenta su más reciente trabajo Las Palabras del Optimista, con motivo de la sexta edición de Artnou Barcelona 2017, evento que se encarga de generar un impulso a la creación emergente y a las nuevas generaciones artísticas.

Jaramillo estudió artes plásticas en la Universidad Nacional de Colombia. Su obra gira en torno a la contemplación, con referencias constantes a la autobiografía, la literatura y la ficción utilizando el dibujo en soportes no tradicionales. Su trabajo ha estado expuesto individualmente en distintas galerias en America Latina.

The Spirit of Imagination de Jordi Bernadó & Quimet Sabaté

La historia de los descubrimientos se entiende a través de la casualidad y de la serendipia. En este caso nos ocupa la historia de los caminos cruzados entre dos personas que crean obras desde puntos de vista contrapuestos. La exposición nos invita a una reflexión respecto hasta qué punto tenemos control de nuestras vidas y carreras profesionales o de los juegos que nos depara el destino.

En última instancia, una vida no es más que la suma de hechos contingentes, una crónica de intersecciones casuales, de azares, de sucesos fortuitos que no revelan nada más que su falta de propósito.

Trilogia de Nueva York, Paul Auster

El origen de la cadena de casualidades parte de un proyecto artístico de galería SENDA que analiza los tránsitos de la Rambla, principal arteria turística de Barcelona, a través de la mirada de dos reconocidos fotógrafos como Massimo Vitali y Jordi Bernadó. Vitali enfoca su trabajo en los espacios de ocio y se encarga de fotografiar el espacio publico y Bernadó nos descubre los interiores de sus edificios. Después de más de un año de trabajo, finalmente la exposición se decide ubicar en el Arts Santa Mònica de Barcelona por el ofrecimiento de la institución.

En el periodo de búsqueda de lugares extravagantes, Jordi Bernadó se sumergió en los submundos de la Rambla y encontró en el Portal de la Pau el estudio de Quimet Sabaté. Se trata de un taller de pintor singular, rocambolesco y abierto a al público. En ese primer encuentro, Jordi Bernadó fotografió su espacio e incluyó las vistas en la exposición del Arts Santa Mònica.

Y entonces, en agradecimiento a su hospitalidad, Jordi obsequio a Quimet Sabaté con un lote de sus libros de fotografía. En ese momento y sin saberlo estaba activando un camino de ida y vuelta. Quimet Sabaté decide arrancar las páginas de sus libros y utilizarlas como soporte para pintar encima elementos de connotaciones surrealistas y recrear nuevas composiciones a partir de las fotografías originales de Bernadó. Estas estampas intervenidas eran vendidas a los turistas como souvenir por un módico precio.

No es hasta más tarde que Bernadó descubre que sus fotografias han sido reutilizadas y decide exponer sus fotografías y añadir las paginas arrancadas con pinturas de Sabaté a la exposición de Jordi Bernadó en el MACUF de la Coruña “Fragmentos para una cronotopografía del simulacro” (2011).

Hace unos meses, Bernadó decide tomar nuevas vistas del estudio del Sabaté con una gran acumulación de sus fotografías intervenidas por el pintor. En la presente exposición, nos encontramos ante el resultado de esta relación y de este camino ramificado a través de las fotografías de Bernadó y las apropiaciones de Sabaté. El trabajo de Bernadó de estos últimos años se ha caracterizado por la creación de la duda si las imágenes que presenta son una plasmación de lo que estamos viendo o si se trata sólo de un simulacro. Quimet utiliza las fotos de Bernadó añadiendo imágenes eróticas y estereotípicas del surrealismo que generan una visión humorística sin una pretensión intelectual ulterior. De esta manera, nos encontramos ante imágenes donde la ambigüedad, la paradoja y la distorsión de Bernadó se combinan con las ficciones superpuestas por Sabaté y dan como resultado un juego de espejos que ahonda en el concepto de representación como simulacro.

New Sculptures by Stephan Balkenhol

Desde 1983, la obra de Stephan Balkenhol se ha caracterizado por su perseverancia en la reintroducción de la escultura figurativa en la escena artística contemporánea. El posicionamiento del artista ante las imperantes tendencias de la época se articula a través de una personalísima técnica. Balkenhol talla maderas blandas de álamo o de obeche, materiales que permanecen claramente visibles en la obra a través de marcas de cincel, grietas o nudos en la madera. El proceso de trabajo deja huellas a través de desbastes o astillas que contrastan con zonas pulidas. En la mayoría de las esculturas utiliza un único bloque de madera que suele policromar para delimitar los ropajes y al que añade un pedestal, en esculturas tipo totem que recuerdan al arte popular y remiten a las técnicas de talla medievales.

Su destreza en la talla se combina con una continuada investigación del rol de la escultura en la creación artística. La figura humana constituye habitualmente el eje conductor de su trabajo; sus personajes generalmente hombres y mujeres anónimos de rostros sin expresión con frecuencia se dejan ver de pie y vestidos de forma corriente. Sus posturas y apariencia son triviales, también misteriosas. No hay expresión identificable en sus rostros, resistiendo de esta manera toda interpretación narrativa, pero si una constatable presencia. Elementos en apariencia tan caprichosos como la posición de las manos o la inclinación de la cabeza se convierten en las claves ocultas que nos sugieren la relación de estas figuras entre sí y con nosotros y que ahondan el vínculo entre las figuras mismas y los espacios o ubicaciones que ocupan.

Balkenhol fuerza con su trabajo un intercambio con el espectador, al que sumerge en un profundo clima de complicidad. El artista además subraya, como parte de su compromiso con lo contemporáneo, la diferencia entre la escala escultórica como escala ideal y la escala humana como patrón real. Balkenhol afirma, invitándonos a descifrar: “Mis esculturas no cuentan historias. En ellas hay algo secreto. No me corresponde a mí revelarlo, sino al espectador descubrirlo.”

 

Meridianos de Sandra Vásquez de la Horra

Sandra Vásquez de la Horra ha desarrollado una obra poética que ilustra narraciones inspiradas en los recuerdos, en el inconsciente y en la sexualidad. Desde el predominio de la figura femenina, su obra delata la personalidad de la artista a través de un lenguaje sintético basado en la huella, en la tipografía y en la austeridad. En la presente exposición, Sandra Vásquez de la Horra enfoca su producción en la tradición mística y religiosa de la Península Ibérica marcada por la leyenda negra y por las tradiciones populares ancestrales.

La exposición Meridianos representa una evolución técnica de su trabajo. La artista continua con su personal técnica de dibujos sellados con una película translúcida de cera que proporciona permanencia y protección a la obra. En pasadas exposiciones presentaba estos dibujos en instalaciones de pequeñas hojas de papel habitualmente distribuidas con formas diversas. Estas composiciones se entrelazaban de forma asimétrica y sin un contenido narrativo. En esta ocasión, Sandra Vásquez de la Horra presenta obra de gran formato fraccionada en diversas hojas de papel que conforman una sola obra. Este cambio de escala corrige y aumenta nuestra posición ante la obra. Son obras de tamaño humano y proporcionales al espectador que irradian cierto voyeurismo y fijan la mirada del público en una suerte de confrontación directa.

Vásquez de la Horra también ha comenzado a elaborar obras tridimensionales construidas en papel con superficies dibujadas. Estas estructuras simples con forma de prisma se asemejan a formas arquitectónicas de pequeñas casas. Cada una de las cuatro caras de estas casas se compone de un plano pictórico independiente que el espectador fusiona en su recorrido para la total aprehensión de la obra. La inspiración para hacer estas casas proviene de los recuerdos de infancia de la artista en Viña del Mar, Chile. La casa modernista donde creció estaba situada en un parque y sus amplios ventanales daban a un entorno con abundante vegetación. La plasmación de sueños infantiles plagados de animales y espesura silvestres deviene en una obra mágica que nos transporta a una relectura de sus ensoñaciones.

En un paso ulterior, la artista presenta también esculturas de cerámica creadas recientemente en un taller de Barcelona y que utilizara próximamente como trabajos preliminares para producir por primera vez escultura en bronce.