Anna Malagrida (Barcelona, 1970).
Vive y trabaja entre París y Barcelona.
Anna Malagrida utiliza fundamentalmente la fotografía y el vídeo para explorar y recrear, a través de una observación atenta, nuestra experiencia cotidiana y el equilibrio inestable entre lo privado y lo público. La artista abandona la representación de la realidad y apela, en cambio, a nuestra fantasía: nos invita a proyectarnos sobre la superficie de sus imágenes y a generar nuestros propios contenidos visuales dentro y fuera de las mismas. Como por su propia gravedad, en el trabajo de Malagrida la ciudad queda transformada en teatro, escenario idóneo para narrar la frágil relación del ser humano con su entorno. La artista primero examina y después nos insta a mirar sin ser vistos. Desde una propuesta lúcida y sin pretensiones, la obra de Anna Malagrida seduce, reconcilia y nos sitúa entre lo visible y lo invisible.