«Roger the Rat» inaugura el nuevo espacio de la galeria: SENDA M&A, en el marco de City Screen 2021

El proyecto está compuesto por una serie de fotografías en blanco y negro producidas en Johannesburgo entre 2015 y 2020, acompañado de un vídeo hecho durante los meses de confinamiento.

A través de estas imágenes, Roger Ballen documenta una criatura mitad humana, mitad rata, que vive aislada de la sociedad. El personaje, motivado por su soledad, intenta crear nuevos compañeros para compartir su vida diaria, pero el aislamiento genera sentimientos de frustración y rabia.

Roger the Rat personifica el impacto de la soledad, la exclusión y la incómoda sensación de asfixia que aflige a los seres humanos cuando están confinados en espacios cerrados. Las consecuencias psíquicas de la pandemia se exploran a lo largo de las imágenes a través de las absurdas acciones del protagonista, que producen un sentimiento de identificación y empatía por parte de los visitantes.

Hijo de un editor de fotografías en Magnum, Ballen trabajó como geólogo y consultor de minería antes de lanzar su propia carrera fotográfica, documentando pequeñas aldeas en África rural y sus habitantes aislados. Sus imágenes son a la vez poderosas alegorías sociales y perturbadores estudios psicológicos. La obra de Ballen «Terrallende» fue considerada uno de los documentos fotográficos más extraordinarios de finales del siglo XX. Fue premiado como Mejor Libro Fotográfico del Año en PhotoEspaña 2001 en Madrid. Fue premiado como Mejor Libro Fotográfico del Año en PhotoEspaña 2001 en Madrid.

Su distinguido estilo fotográfico ha evolucionado utilizando simplemente un formato cuadrado y una combinación de colores en blanco y negro. Sus primeros trabajos tienen una clara influencia en la fotografía documental, pero durante la década de 1990 desarrolló un estilo que describió como ficción documental. Su estilo fotográfico distintivo ha evolucionado utilizando simplemente un formato cuadrado y una combinación de colores en blanco y negro.

Roger Ballen, Amputee. Archival pigment print. 61 x 43 cm. 2015
Roger Ballen, Flattened. Archival pigment print. 61 x 86 cm. 2020
Roger Ballen, Revealed. Archival pigment print. 61 x 43 cm. 2020

Donald Sultan y la Resurrección de la Naturaleza Muerta

La galeria Senda inauguró la primavera con “Day and Night: New Paintings and Drawings”, la primera exposición del reconocido americano Donald Sultan en España. Formada por un conjunto de piezas de gran escala con la flor de mimosa como motif, Sultan ha demostrado que un resultado puede conseguirse con componentes inusuales. Es el caso de Spring Mimosa Dec 12, por ejemplo, un cuadro de flores regado con alquitrán y esmalte, y no con agua.

Seguramente estés pensando ¿bodegones? ya pasó la época del frenesí por la naturaleza muerta y los vasos de vino a medio acabar, ¿no? migajos de pan junto a la pera y la manzana carcomida. Ese detalle no lo habrá ignorado el artista, quien trata de pintar al ínfimo pormenor lo que ve y lo que trazan sus manos con las señales que reciben desde lo más íntimo de la retina. También están aquellos que optan por las flores, bien sea por afán de ser romántico, o porque eran de ocasión y la primavera no es temporada de peras. Un lienzo blanco, manchado con el pigmento de colores terrestres – verde marron y amarillo apagado.

Pues quizás sí que se terminó la moda del bodegón convencional. Cézanne se llevó con él el último suspiro del artista admirador de frutas desmayadas sobre cerámicas, y Van Gogh el de los girasoles, que ya dejaron de girar en la mente de aquel que dice ‘saber de arte’. Tal vez seamos pocos los que seguimos encontrando paz en la representación de la naturaleza, aunque no sea acompañada de movidas conceptuales y motivos superiores. Una flor, una fresa, un paisaje, algo tan mundano como el humo de un cigarro que baila en la oscuridad de un piso cerca de 24th with 6th avenue.

A veces uno necesita eso, y nada más. Como un respiro en el sofoco que supone vivir en un tiempo donde uno sufre más por estrechar su gusto a un mundo que tarda poco en decidir quién es digno de hacer arte y quien no, y qué merece su puesto en una pared blanca y quién nunca saldrá de su habitación con olor a pintura y hormonas.

Olvídate de la pared blanca, y ya que estás, del lienzo blanco también. De hecho, imagínate en una planta de grava, donde los humos a alquitrán y el calor que emerge de la pirámide de piedras hierven la sangre y tapizan los pulmones. En medio de todo el panorama industrial – del metal, la madera, el acero y el fuego – crece una flor. No es fácil imaginarlo, de hecho, es casi imposible que una flor nazca en medio de tanta dureza, y sin embargo lo hace—un átomo de vida en un lugar que nunca la cobró. Es una flor redonda, naranja, aunque te suena haberla visto en otro lado de otros colores, roja, amarilla… redonda como el sol, como una naranja, como un diente de leon al que aún no se le ha pedido el deseo.

El bodegón de Cézanne emite un aroma a mantel macerado con néctar de melocotón y el charquito de vino que derramó tu padre en la que era su cuarta copa. El girasol de Van Gogh trae a la mente el olor del campo y la humedad distante del mar. Pero las mimosas de Donald Sultan confunden los sentidos: uno ve círculos minimalistas de mimosas, rodeados de un centenar de hojas de olivo – piensas pues: sur de francia, aire seco y afrutado… pero cuando te acercas a la obra se te caen los esquemas. Ya no piensas en el campo francés, si no en el camino hasta ahí — el viaje. El calor del asfalto cuando bajas a estirar las piernas y el olor a alquitrán que emite la fábrica que se ha construido lejos de la vida para no acortar la misma con la impureza del humo que saca por sus chimeneas altas.

Verás, la escena provenzal de Cézanne y las flores a pinceladas densas habían tomado un espacio recóndito en mi archivo de obras preciadas. No por falta de admiración, ni pretensión de necesitar que el arte me ‘diga algo’. Si no porque ando buscando obras que me dejen disfrutar de la belleza en un mundo en el que raras veces la belleza viene sin zancadilla pelotera. Que entre lo industrial puede surgir lo natural.

Recibir flores sigue siendo un placer, aunque sea acompañado del run run de los coches y el aire contaminado de la ciudad. Si te acercas a la obra de Sultan podrás ‘oler’ tu infancia en el pueblo, el sabor dulce de la fruta madurada al sol, y la brisa que pasa mientras lees bajo el olivo en una tarde de agosto. Pese a que lo que realmente huelas sea masonita, alquitrán y esmalte.

De eso se trata, yo creo —de estimular los sentidos con lo que crees que es, lo que querrías que fuese, y con lo que realmente es. Si no lo crees, míralo por ti mismo: Donald sultan, en galeria Senda, hasta finales de Julio.

Glenda León en el MARCO de Vigo con «Música de las formas»

El 18 de junio el Museo de Arte Contemporáneo de Vigo (MARCO) inaugura «Música de las formas», una exposición de Glenda León comisariado por José Jimenez.

La artista cubana vuelve con una serie de obras representativas de la unión entre la poesía y el objeto, creando una síntesis entre lo visual y lo sonoro. León utiliza objetos corrientes y materiales en bruto y los transforma de manera que revelan su poder metafórico. De esta manera, las obras manifiestan una mirada sensible ante lo cotidiano. Sus obras transitan entre la esfera de lo íntimo y lo público. Exhibe su capacidad artística de creación de nuevos significados a través del proceso de contextualización, manipulación y asociación de los objetos.

En «Música de las formas», la artista evidencia la influencia de la música en su crecimiento, tanto personal como artístico, y lo conectado que está a los movimientos de los astros. José Jiménez, comisario de la exposición, menciona a Pitágoras para justificar este fenómeno al que también se refiere como «armonía del cosmos.» León consigue conectar la tierra y el cielo, lo cotidiano y lo superior.

Estrellas Masticadas (2015) es un ejemplo de ello: la autora crea cuerpos celestes al unir chicles desechados en el suelo, formando constelaciones que se debaten entre algo tan mundano como una goma de mascar y la sublimidad de los astros que tantos otros genios habían observado en en un pasado.

La exposición podrá verse hasta el 31 de octubre de 2021.

Peter Halley llena de color las paredes del museo Nivola con «ANTESTERIA»

Los meses pasados entre cuatro paredes incitaron al artista Peter Halley a repensar el mundo artístico que había estado inventando desde los años ochenta. Cambios en el modo de vida resultaron en cambios en modos de expresión, así pues, el neoyorkino optó por buscar límites alternativos a las “celdas” y “prisiones” que aparecían a menudo sus previas pinturas. 

Nueve meses después de la exposición New Paintings en Senda, Halley ha trasladado su explosión de colores laberínticos a las paredes del museo Nivola en Orani, Cerdeña. ANTESTERIA, cuyo nombre proviene de la festividad griega en devoción al dios Dionisio y a la llegada de la primavera, no es la primera instancia del artista con los murales. 

Alejándose de la naturaleza estática, rectangular y letárgica del lienzo convencional, Halley ha adaptado sus coloridas formas a las paredes del museo como tantos otros grandes artistas han hecho a lo largo de la historia. Desde las pinturas rupestres a los frescos de Giotto en la capilla de los Scrovegni en Padua, Halley ha seguido este legado creando una experiencia catártica al combinar los colores neones característicos de su obra con los motifs de la sala. Las ventanas arqueadas, con vitrales parecidos a los de las iglesias, están en conversación con las pinturas psicodélicas y dinámicas del artista americano. 

Un lugar prístino resucitado por colores; un espacio laico presentado para recibir una atención que baila la línea entre la admiración y la devoción. Las celdas características de Halley aparecen distorsionadas, creando una continuidad de líneas que conducen la mirada de un lado de la sala al otro, parando entre medio para admirar los colores salpicados en formas caleidoscópicas de las paredes laterales, al igual que los paneles inferiores, que combinan formas geométricas con trazos más libres. 

Peter Halley no cesa en reinventarse en acorde al mundo en el que vivimos. Su arte fluctúa de la misma manera en la que lo hacen las costumbres, la cultura y el capitalismo. Así lo demostró con New Paintings en Senda el pasado septiembre, cuando se alejó del lienzo cuadrado y lo sustituyó por formas geométricas abstractas que transmiten libertad, y así lo está demostrando en Nivola.

ANTESTERIA estará expuesta hasta el 22 de Agosto. 

Presentación libro ZETA CERO de Yago Hortal

El pasado 25 de mayo, Yago Hortal presentó su primera monografía en la librería ONA de la calle Pau Claris.

Yago Hortal participa en una charla, mediada por la periodista Bibiana Ballbè, que invita al público a conocer su trayectoria artística y su proceso creativo.

Su primera monografía, producida por Senda Ensayo repasa su producción artística de los últimos 15 años, dibujando la evolución de sus trabajos durante este tiempo, y dejando entrever la nueva dirección de su obra en busca de nuevos horizontes.

La obra de Hortal, que desde el principio ha estado comprometida con la redefinición del formalismo de la pintura abstracta, funciona a nivel metalingüístico, y celebra el diálogo de la obra y de su propio proceso de creación.

Yago Hortal (Barcelona, 1983) estudió Bellas Artes entre la Universidad de Barcelona y la Universidad de Sevilla. En 2007, un año después de graduarse, recibe el 49º Premio a la Pintura Joven. El año siguiente, empezó a exponer tanto en España como en el resto de Europa y Estados Unidos, ganando renombre internacional con tan solo 25 años de edad. Su obra parte de un fuerte compromiso con la pintura y con el mismo acto de pintar. Convirtiendo la tela en el escenario donde el artista estructura formas coloridas que provienen tanto del azar como de un acto consciente. Su pintura expresa pasión por retratar el color y no deja que el lienzo le ponga un límite; de tal manera que evoca al tacto, hay un deseo por parte del espectador de tocar la pintura: crea sensaciones.

Visita nuestra shop para adquirir el libro: https://galeriasenda.com/shop/yago-hortal-zeta-cero/

Works on paper : Solo Show de Sandra Vásquez de la Horra en Arco E-xhibitions

Sandra Vásquez de la Horra, El último tango. Grafito y Gouache sobre papel encerado. 106 x 134 cm. 2020

Ese mes de marzo Galería Senda presenta una exposición online con los trabajos de la artista chilena Sandra Vásquez de la Horra. La artista desarrolla una obra poética donde la tradición mística y popular,  muy presentes en su formación personal, se manifiesta por medio de su estilo gráfico repleto de imágenes oníricas. Sus dibujos son verdaderas narraciones inspiradas en los recuerdos, en el inconsciente y en la sexualidad. 

La exposición invita al visitante a conocer  la técnica personal de la artista: el empleo de lápiz y acuarelas de color para posteriormente aplicar un baño de cera a los trabajos, película transparente que proporciona permanencia y protección a la obra. Las composiciones, producidas en diversos formatos, se entrelazan de forma asimétrica y atraen  la mirada del público gracias a su tono simultáneamente humorístico y crítico, en el cual cada dibujo es parte de una narración iconográfica.

Los trabajos de Sandra Vásquez de la Horra exponen un lenguaje singular propio de la artista y construyen nuevos territorios a ser explorados por el público.

Link para exposición online: https://3d.exhibify.net/?uuid=b98222c5-8719-4083-9cde-5725892ed110&v=v981

Link para Viewing Room : https://www.artsy.net/viewing-room/galeria-senda-sandra-vasquez-de-la-horra

De la tumba me levanto. Lápiz sobre papel / Baño de cera. 39 x 28 cm. 2013
Desde mis raíces. Lápiz sobre papel / Baño de cera. 39 x 26 cm. 2014
El viaje de Olokun. Lápiz y acuarela sobre papel / Baño de cera. 76 x 112 cm. 2013.

«Roger the Rat» en ARCO E-XHIBITIONS abril 2021

En abril, Senda Gallery presentó el nuevo proyecto de Roger Ballen, Roger the Rat.

El proyecto está compuesta por una serie de fotografías en blanco y negro producidas en Johannesburgo entre 2015 y 2020, acompañado de un vídeo hecho durante los meses de confinamiento.

A través de estas imágenes, Roger Ballen documenta una criatura mitad humana, mitad rata, que vive aislada de la sociedad. El personaje, motivado por su soledad, intenta crear nuevos compañeros para compartir su vida diaria, pero el aislamiento genera sentimientos de frustración y rabia.

Roger the Rat personifica el impacto de la soledad, la exclusión y la incómoda sensación de asfixia que aflige a los seres humanos cuando están confinados en espacios cerrados. Las consecuencias psíquicas de la pandemia se exploran a lo largo de las imágenes a través de las absurdas acciones del protagonista, que producen un sentimiento de identificación y empatía por parte de los visitantes.

Hijo de un editor de fotografías en Magnum, Ballen trabajó como geólogo y consultor de minería antes de lanzar su propia carrera fotográfica, documentando pequeñas aldeas en África rural y sus habitantes aislados. Sus imágenes son a la vez poderosas alegorías sociales y perturbadores estudios psicológicos. La obra de Ballen «Terrallende» fue considerada uno de los documentos fotográficos más extraordinarios de finales del siglo XX. Fue premiado como Mejor Libro Fotográfico del Año en PhotoEspaña 2001 en Madrid. Fue premiado como Mejor Libro Fotográfico del Año en PhotoEspaña 2001 en Madrid.

Su distinguido estilo fotográfico ha evolucionado utilizando simplemente un formato cuadrado y una combinación de colores en blanco y negro. Sus primeros trabajos tienen una clara influencia en la fotografía documental, pero durante la década de 1990 desarrolló un estilo que describió como ficción documental. Su estilo fotográfico distintivo ha evolucionado utilizando simplemente un formato cuadrado y una combinación de colores en blanco y negro.

Visita el siguiente link para ver la exposición online:

https://3d.exhibify.net/?uuid=2d406fd8-19e9-4902-8521-7a23b644e6da&v=v1191

Roger Ballen, Amputee. Archival pigment print. 61 x 43 cm. 2015
Roger Ballen, Flattened. Archival pigment print. 61 x 86 cm. 2020
Roger Ballen, Revealed. Archival pigment print. 61 x 43 cm. 2020

Zosen y Mina Hamada presentan ¨Una Mina de Color¨, un proyecto participativo a gran escala en el barrio de La Mina, Barcelona

«Desde hace tiempo nos rondaba la idea de pintar un gran mural en el barrio de La Mina, para darle color a las calles y visibilidad a la comunidad».

Zosen creció en Sant Adrià del Besós y allí empezó a hacer sus primeros grafitis y murales. Al cabo de los años logró viajar por el mundo y dejar su huella por diferentes ciudades de América del Norte y del Sur, Europa y Asia. Muchos de esos murales en colaboración con la artista japonesa Mina Hamada, la cual al llegar a Barcelona en el año 2009 le llamó la atención que hubiera un barrio con su nombre y desde ahí empezó a fraguarse esa idea.

En el verano de 2018 Zosen y Mina empezaron a hacer talleres con algunas entidades que trabajan con jóvenes del barrio para poder acercarles su arte mural y la propuesta de crear un mural participativo con las ideas de todos. El primer taller se realizó en l’Associació Casal Infantil de La Mina, dónde los niños y niñas pintaron sus ideas y sueños de cómo imaginaban La Mina del futuro. En otoño se continuaron los talleres con las entidades Salesians Sant Jordi (Grupo Unión) y el Casal dels Infants. En los talleres participaron jóvenes de diferentes nacionalidades y culturas, los cuales son vecinos de La Mina y el Besòs y demuestra la variedad multicultural del barrio. Los artistas Zosen y Mina recogieron las ideas que dibujaron y pintaron todos los participantes de los talleres, y a partir de ahí empezaron a crear la propuesta para el boceto del mural.

Un barrio dónde la diversidad cultural está presente, el flamenco, el mar y los planetas que forman parte de los nombres de las calles y componen la galaxia de La Mina.

Los niños participantes de los talleres cuándo se les preguntó qué deseaban o cómo imaginaban su barrio del futuro la mayoría coincidió en valores como: la convivencia, el respeto entre las diferentes culturas, dar visibilidad dentro de la sociedad a las personas que viven en el barrio, la paz, la naturaleza, espacios verdes, la amistad, el amor, la familia y la cultura.

Zosen y Mina pintaron este mural durante el mes de Enero de 2019 en la pared medianera del edificio de vecinos de la calle Estrellas enfrente del Polideportivo municipal y el Centro Cultural Gitano; creando el primer mural de gran formato en La Mina y que ahora se puede ver desde varios puntos como la Ronda del Litoral, el tren de cercanías o caminando desde la calle.

 

 

Este proyecto ha sido posible gracias la colaboración entre el Ajuntament de Sant Adrià del Besós, la asociación El Generador, el apoyo del Ecoparque del Mediterráneo, las entidades que trabajan con los jóvenes del barrio y los artistas Zosen y Mina Hamada.

Agradecimientos:

Associació Casal Infantil de La Mina

Salesians Sant Jordi (Grupo Unión)

Casal dels Infants

Centro Cultural Gitano

Profesora Chuchu

Rafael Perona

Manuel Fernández

Karulo Abellán

Sra. Carmen

Juan Carlos Ramos

 

Dirección: Germán Rigol

Música original: Falete Perona

Sonido y entrevistas: Germán Rigol y Zosen

Edición y fotografía: Germán Rigol

Peter Halley presenta «Heterotopia I» en la Bienal de Venecia 2019

Según el filósofo francés Michel Foucault, las heterotopias son mundos entre mundos, que reflejan pero perturba lo que se encuentra en el exterior. Son espacios que de algún modo, son transgresivos, o “otros”: intensos, contradictorios o transformadores. Foucault provee ejemplos: barcos, cementerios, prisiones, jardines de la antigüedad, ferias, baños Turcos, y mucho más.

Dentro del espacio de exhibición de cuarenta metros de largo, en la Academia de Arte, Peter Halley ha creado una secuencia de habitaciones temáticamente variadas que progresan en un santuario abovedado. Este laberinto parecido a un videojuego se desarrolla de una habitación a otra, combinando elementos de la arquitectura clásica como las acanaladuras, los cenotafios, y un frontón roto, con impresiones digitales del tamaño de una pared, matrices de LED que cambian de color, y una escultura a gran escala cortada con láser.

Para enriquecer más el lenguaje de esta narrativa, Halley invitó artistas americanos como Lauren Clay, R.M. Fisher, y Andrew Kuo para contribuir en la instalación. Trabajando con murales de pared a pared impresos digitalmente, Lauren Clay y Andrew Kuo crearon habitaciones separadas realizando sus propias visiones individuales. R.M. Fischer produjo la escultura totémica iluminada en el santuario que culmina la instalación. Además, la escritora con sede en París, Elena Sorokina, ha contribuido con los textos originales de los muros.

Francis Ruyer expone “Hurricane/Time/Image”. Una alusión de la experiencia humana y el uso de la tecnología

La exhibición “Hurricane/Time/Image” desvía una nueva línea de comprensividad alrededor de la práctica de Francis Ruyter. Comisariado por Mohammad Salemy, la exposición consiste en un ensamblaje de dibujos, pinturas y objetos, que fechan de 1990-94 y 2015-19. El proyecto se realiza en FRANZ JOSEFS KAI 3, un espacio de exhibición programado en paralelo al Angewandte Innovation Lab, un programa de la Universidad de las Artes Aplicadas en Viena, Austria. El proyecto se inauguró el 10 de abril y permanecerá operativa hasta el 9 de mayo.

“Hurricane/Time/Image” está destinado a interrumpir narrativas artísticas, estética y desarrollos de la carrera de Ruyter, al igual que condiciones sociales que envuelven su producción artística y subjetividad específica para el artista. Esto sugiere que la fuerza caótica de la tecnología siempre está presente en la obra de un artista, reorganizando la relación con el pasado, el presente y el futuro hacia nuevas constelaciones. En vez de usar el trabajo reciente para dar sentido a la práctica temprana, Ruyter da luz a preocupaciones incrustadas, temas y motivos que han estado resonando en la práctica del artista desde las etapas más prematuras de su carrera.

Desde 2009, Ruyter ha estado centrándose en su trabajo con fotografías que encontraba en los archivos digitales de la Biblioteca del Congreso de Estados Unidos usando la palabra clave “máquina”. Este filtro particular destaca como los pensamientos del artista sobre las máquinas han informado su obra desde que realizó sus dibujos y pinturas al inicio de los años 90. De ese modo, los trabajos más antiguos señalan la transformación de los medios analógicos a los digitales, y la persistencia de las arcaicas tecnologías de presentación y modelaje en ese nuevo mundo digital. Por otro lado, los trabajos más nuevos van más allá de investigar lo abstracto, lo geométrico y, finalmente, la esencia inhumana de la representación. La exhibición resalta la visión mental hacia las conexiones entre el arte y los medios tecnológicos, insistiendo en el rol primario de pintar al mediar las similitudes y diferencias.

El resumen abstracto de la exposición de lo analógico, lo digital y lo algorítmico se asemeja a una transformación igualmente importante en la propia vida del artista. En 2016, Ruyter empezó una transición de género. A este aspecto, el trabajo de Ruyter, tanto del pasado como del presente, puede ser considerado una petición para apartar la pregunta de la identidad humana y comprender las cualidades del género. Desde este ángulo, el hilo más fuerte que une las obras anteriores del artista a su práctica más reciente, es la lucha por aislar las apariencias “naturales” de la representación analógica, centradas en el ser humano, desde su realidad inhumana y cibernética. La exposición no enfatiza la experiencia humana a favor de cambios caóticos y cósmicos que están en el corazón de la evolución del lenguaje, la razón y la lógica entre animales, humanos y máquinas por igual.

Mohammad Salemy es un artista con su taller en Berlín, también es crítico y comisario en Canadá. Cursó sus estudios de máster en crítica y comisariado en la Universidad de British Columbia. Como artista, ha presentado su trabajo internacional y nacionalmente, especialmente en Ashkal Alwan (Beirut, 2015), Witte de With (Rotterdam, 2015) y Robot Love (Eindhoven, 2018). Sus escritos han sido publicados en las plataformas E-flux journal, Flash Art, The Third Rail, Brooklyn Rail, Ocula y Spike. Y como comisario, Salemy ha trabajado en exposiciones en el Tranzit Display (Praga, 2016), además de que su experimento “For Machine Use Only” fue incluido en la XII edición de la Bienal de Gwangju (2016). En 2018, Salemy fue comisario en el Sofia Queer Forum con colaboración de Patrick Schabus en la sucursal de Vaska Emanouliva en la Galería de Arte de la Ciudad de Sofía.